El Sindicato Médico exige el cese inmediato del gerente del Servicio Cántabro de Salud (SCS), Julián Pérez Gil, por sus comentarios a propósito de la investigación abierta tras descubrirse «irregularidades» en la derivación de pacientes para la realización de pruebas diagnósticas a centros privados. Pérez manifestó que «es una práctica delictiva» y que iba a tomar cartas en el asunto, insinuando que hay más de un caso y que se viene haciendo desde hace tiempo». Son estas afirmaciones, genéricas y sin mayor base, las que han indignado al Sindicato Médico: «Es del todo inadmisible que el gerente y máximo responsable del SCS (…) ponga bajo sospecha la honorabilidad de todos los profesionales ensuciando a los mismos bajo una dudosa estela de corrupción».
FUENTES: eldiariomontanes.es – consalud.es