Considera que estas unidades suponen un grave riesgo para la salud de la población y lamenta que la Administración opte por priorizar el ahorro antes que la salud y la calidad de la asistencia sanitaria a los ciudadanos.
Considera que cualquier solución que se quiera dar a la temporalidad tendrá que contemplar, en el caso de los médicos, la singularidad de una profesión en déficit creciente y la particularidad de las distintas comunidades autónomas.
La Consejería de Sanidad ha planteado una modificación de plantilla orgánica que supone la pérdida de 4 puestos de médico de Familia en contra de todo lo acordado anteriormente.