Dos de las diez plazas que integran la plantilla de radiólogos del hospital Obispo Polanco de Teruel han quedado vacantes en el primer llamamiento tras las oposiciones. Aunque está pendiente una segunda vuelta, la preocupación reina en el Servicio de Rayos turolense, que este verano tuvo que cancelar las mamografías de revisión y las interpretaciones de radiografías solicitadas por médicos de cabecera por falta de personal. Desde el sindicato médico CESM reclaman una «reflexión», tanto por parte del Salud como por los propios facultativos, «para ver qué está pasando y cómo podemos resolverlo». Las mismas fuentes sindicales denuncian que el plan de incentivos para plazas de difícil cobertura «no ha funcionado» y estiman necesario «aportar nuevas ideas y soluciones» para acabar con el déficit de especialistas en el Obispo Polanco. La CESM apunta que los problemas para la conciliación familiar en una ciudad con malas comunicaciones «obligan a buscar una nueva forma de trabajar».
FUENTES: heraldo.es
