CEMSATSE, la fuerza sindical que engloba a los sindicatos CESMAragón y FASAMET de personal médico y SATSE de enfermería, ha exigido en la Mesa Sectorial de Sanidad celebrada este lunes con los representantes del Servicio Aragonés de Salud, que se aplique a los sanitarios desde el 1 de enero de 2024 la jornada laboral de 35 horas semanales, las mismas aprobadas ya para el resto de trabajadores de la DGA. Como primera fuerza sindical del sector, denuncia que la propuesta de llegar a estas horas, de manera progresiva, en 2026, es una “discriminación injustificable”.
Los sindicatos profesionales destacan que las 35 horas semanales se aplican ya en 14 comunidades autónomas e igualarlas en Aragón es una reivindicación pendiente, que no se abordó en el acuerdo firmado en enero con el Gobierno de Aragón para mejorar la Atención Primaria, por su ámbito superior. De forma sorpresiva, otros sindicatos firmaron en marzo un acuerdo que aceptaba esta demora de tres años “que nunca hemos compartido, porque supone una falta de consideración intolerable tratar de forma distinta a un empleado público del Pignatelli que a uno que trabaja en un hospital o centro de salud”.
Este acuerdo del SALUD con otros sindicatos, calificado de “Decálogo de la vergüenza” por el maltrato que supone para los sanitarios, motivó una campaña de movilizaciones durante el pasado mes de mayo, con concentraciones todos los jueves ante diferentes sedes. Aunque CEMSATSE decidió suspender sus protestas hasta la formación de un nuevo Gobierno, tras las elecciones autonómicas, recuerda que todas sus reivindicaciones siguen pendientes.
Además de aplicar al personal del SALUD la jornada de 35 horas semanales, las exigencias incluyen: el desbloqueo completo de la carrera profesional para los licenciados y diplomados sanitarios, que, tras trece años suspendida, se ha levantado solo para el personal de gestión y servicios; el reconocimiento de la carrera para todo el personal temporal, que el Gobierno de Aragón sigue sin aplicar pese a las sentencias del Tribunal Supremo; y que los tutores de formación MIR de los hospitales tengan las mismas compensaciones que las aprobadas para los de Atención Primaria.
CEMSATSE resalta que ayudar a desarrollar su labor en mejores condiciones es imprescindible para atraer médicos y enfermeros frente a otras comunidades y poder ofrecer la mejor atención sanitaria a los ciudadanos, “y ahora que han abierto la negociación, no vamos a parar para lograr el reconocimiento de las mismas condiciones que el resto de trabajadores de la DGA, porque no podemos consentir que a los sanitarios se nos considere de segunda clase”.