El sindicato médico CESM Castilla-La Mancha (CESM CLM) quiere expresar su más firme y enérgica condena ante la grave agresión ocurrida recientemente en el Centro de Salud de Villacañas (Toledo), donde un individuo amenazó a varias profesionales sanitarias y causó daños materiales en las instalaciones.
Este lamentable suceso no es un hecho aislado. Hace exactamente un año el sindicato ya denunció un incidente similar y, ante su petición reiterada de vigilancia jurada por ser un centro conflictivo, la G.A.I. de Alcázar de San Juan dotó de personal de seguridad al Centro de Salud que, sin justificación, retiró posteriormente al mes y medio. Ante esa circunstancia, CESM CLM, en reunión con el equipo de dirección de dicha Gerencia, exigió que se mantuviese el servicio de seguridad lo cual, a pesar de la insistencia sindical, no fue estimado, manteniéndose esa situación hasta el momento actual.
La reiteración de este tipo de actos violentos es inaceptable y pone de manifiesto la desprotección a la que se enfrentan diariamente los profesionales sanitarios en el ejercicio de su labor. Es intolerable que quienes dedican su esfuerzo y vocación al cuidado de la salud de la ciudadanía se vean expuestos a situaciones de violencia y amenazas.
Ante esta grave situación, CESM CLM exige de manera inmediata al SESCAM la presencia permanente de Vigilancia Jurada en el Punto de Atención Continuada del Centro de Salud de Villacañas. Esta medida es fundamental para ofrecer una respuesta inmediata y disuasoria ante cualquier intento de agresión y garantizar la integridad física y psicológica de los profesionales.
Asimismo, exige al SESCAM que se persone como acusación particular en todos aquellos casos de agresión en los que se ponga en riesgo la vida o la integridad física de sus trabajadores. Es imprescindible que la administración sanitaria muestre un compromiso firme en la defensa de sus profesionales y envíe un mensaje claro de tolerancia cero ante la violencia en el ámbito sanitario.
No se puede permitir que los centros de salud se conviertan en escenarios de violencia. La seguridad de los profesionales es una prioridad ineludible y el SESCAM tiene la responsabilidad de adoptar todas las medidas necesarias para garantizarla.
CESM CLM se solidariza con las profesionales afectadas por esta agresión y les ofrece todo su apoyo. No cejará en su lucha hasta que se implementen las medidas necesarias para que todos los profesionales sanitarios puedan desarrollar su labor en un entorno seguro y libre de violencia.
