El hospital Obispo Polanco de Teruel ha suprimido dos de las cuatro consultas del servicio de ginecología por la falta de especialistas con la llegada del verano y las ausencias por vacaciones. La interrupción de la actividad ha dejado en al aire, al menos, el tratamiento de una pareja de la capital turolense que había iniciado una terapia contra la infertilidad y que, tras una primera inseminación, ha visto cancelado el proceso hasta octubre, cuando el Gobierno aragonés confía en normalizar la atención. El servicio de ginecología cuenta con nueve especialistas adscritos, pero dos plazas están vacantes y la escasez de la plantilla se agravará con las vacaciones de los facultativos. Desde el Departamento de Sanidad indicaron que en los próximos días la DGA ofertará dos plazas de médicos internos residentes (MIR) para completar la dotación de ginecología del Obispo Polanco.
FUENTES: heraldo.es