La pandemia COVID ha obligado a habilitar espacios que se han restado a otras áreas, como urgencias pediátricas, lo que repercute en peor calidad asistencial.
Considera que es un error conceder, incluso temporalmente, las competencias de los médicos especialistas a los médicos que no han obtenido su titulación.
Reclaman estabilidad para los jóvenes especialistas en medicina familiar y comunitaria y a los pediatras de AP con contratos dignos y estables que eviten que se sigan marchando.
Concluyen que si en los próximos días no son convocados por el ministro de Sanidad realizarán su trabajo al margen de las mesas de diálogo y negociación.