El Sindicato Médico de la Comunidad Valenciana CESM-CV denuncia el colapso que padece de forma crónica el servicio de urgencias del Hospital Marina Baixa y la falta de previsión de adecuación de dicho servicio a las necesidades reales cara a la entrada de una campaña de verano que se prevé de récord.
No solo es un problema de falta de profesionales, que lo es, el problema es de más hondo calado. En el Hospital Marina Baixa, las instalaciones en las que se ven obligados a trabajar los médicos de urgencias de este hospital y la falta de camas para ingresos hospitalarios está provocando el bloqueo de pacientes en un servicio en el que no caben. En estos momentos tenemos más de 30 pacientes ocupando el escaso espacio disponible en urgencias a la espera de conseguir una habitación en planta. De ellos la mitad permanecen en un box de urgencias más de dos días a la espera de cama, y todo esto antes de la avalancha de veraneantes que, si es igual que todos los años duplicará las asistencias en urgencias y los ingresos hospitalarios. Se pasará de una media de 150 atenciones en urgencias a más de 400 con los mismos medios y en el mismo espacio.
Esto desgraciadamente no es nuevo, el Sindicato Médico lo lleva denunciando desde hace años y la gerencia de este Departamento ha hecho y hace oídos sordos en una total muestra de falta de responsabilidad. Las consecuencias, más que previsibles de todo esto serán no solo la imagen tercermundista que ofrecerá nuestra Comunidad en plena campaña turística, sino que ira mucho más allá; aumentarán las agresiones, la fuga de profesionales y el problema irá a peor. La Conselleria tiene que, de una vez por todas, adoptar ya soluciones duraderas y no parches que de poco o nada sirven.