La Confederación Estatal de Sindicatos Médicos (CESM) ha valorado la propuesta conjunta de los ministerios de Sanidad e Inclusión, Seguridad Social y Migraciones de permitir que los médicos de Familia y Pediatría puedan alargar su edad de jubilación haciéndola compatible con su pensión, como un intento de buscar soluciones a un problema palpable, pero admite que es una opción que constituye un parche que no pone solución a la falta de médicos y que la Administración sigue sin contar con los representantes de los profesionales para tomar decisiones que les afectan.
En este sentido, CESM considera que el anuncio aún tiene muchos puntos que no se han aclarado por una redacción confusa sobre cómo funcionará esta opción, como cuáles serán las retribuciones finales en ese trabajo al 50%, la carga de trabajo que se deberá realizar, la falta de valoración -puesto que es algo transitorio- y limitación solo a las especialidades de Medicina de Familia y Pediatría de Atención Primaria y excluir de esa compatibilización al resto de especialidades deficitarias, así como si esa compatibilidad irá acompañada de un aumento de pensión, etc. Considera, por tanto, que existen otras alternativas, como puede ser un aumento de la pensión de jubilación una vez que se pase a esta situación.
Ante estas incertidumbres y cómo se ha presentado la propuesta, la Confederación considera que este tipo de medidas u otras similares, aunque tengan carácter temporal, deben aplicarse a todas las especialidades donde existe un déficit, y en este sentido, además de no aclarar cuestiones como el aspecto retributivo de la pensión, no se ha desarrollado la jubilación parcial -que aparece en el Estatuto Marco y aún está pendiente de desarrollar-, y no se aprueba la jubilación flexible desde los 60 años sin pérdida retributiva hasta los 70 años, e incluso hasta los 72, el que voluntariamente quiera prorrogar como lleva años reclamando CESM.
En definitiva, la propuesta muestra que se está empezando a trabajar para intentar poner soluciones a la situación actual, pero se queda muy lejos de algo realmente efectivo, máxime cuando, una vez más, no se ha contado con la opinión de los afectados a la hora de elaborarla y no responde a las necesidades de los profesionales. Por ello, CESM solicitará una reunión urgente al ministro de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones para solicitar una explicación más en profundidad de cómo queda esta propuesta, así como para trasladarle sus demandas.
