El 12 de abril se celebra el Día de la Atención Primaria, eje fundamental de nuestro Sistema Nacional de Salud, y desde el Sindicato de Médicos de Castilla-La Mancha (CESM CLM), mayoritario de los facultativos de la comunidad, han querido manifestar su apoyo y reconocimiento a todos los compañeros, médicos y pediatras de Atención Primaria, que desarrollan su labor asistencial en cada Centro de Salud y Consultorio local de la región con vocación y entrega diaria digna de elogio.
«Aprovechar este día para reivindicar ante la población, nuestros pacientes, políticos y gestores sanitarios que nos gobiernan y dirigen, la necesidad de una reforma de la Atención Primaria desde su base, a nivel Nacional. Reforma que planteamos detallando los puntos más importantes de nuestro Decálogo:
1. La Atención Primaria como eje del sistema sanitario, debe disponer de unos presupuestos propios, específicos y suficientes, para poder dotarla de plantillas adecuadas y de esta manera poder atender la demanda asistencial real.
2. Los médicos de Atención Primaria, médicos de Familia y pediatras, deben ser quienes gestionen y determinen sus agendas, sin ser alteradas externamente. Solo así se podrá garantizar una asistencia de calidad.
3. La gestión de la asistencia ha de basarse en criterios profesionales y científicos que partan desde los equipos que constituyen la base de la Atención Primaria, y estos deberían estar por encima de otros criterios.
4. Dada su importancia en el sistema sanitario, los médicos de familia y pediatras deberían tener acceso al catálogo completo de pruebas complementarias para poder asistir a sus pacientes y tratar sus procesos sin verse obligados a derivar a los hospitales innecesariamente, evitando con ello la posible saturación de las Urgencias.
5. Sería indispensable para la Atención Primaria tener un entorno profesional y laboral atractivo: estabilidad, incentivación basada en criterios profesionales, reconocimiento de la penosidad… etc.
La mejora de las condiciones laborales se debe centrar en:
– Garantizar unas agendas de trabajo, gestionadas de forma autónoma.
– Dotación adecuada de recursos humanos necesarios para el ejercicio de la Medicina con calidad, garantizando de esta forma la plena estabilidad.
– Priorización de la salud laboral de los profesionales, garantizando su seguridad e integridad física y mental.
– Exigir que el lugar del trabajo sea seguro y que la reparación integra del daño causado en la violencia sanitaria sea, bien por procedimientos administrativos o penales.
– Reconocimiento inmediato de la Carrera Profesional en función de los méritos ya adquiridos, así como la garantía de poder acceder a formación, docencia e investigación durante su jornada laboral.
– Actualización del sistema retributivo acorde a la formación, responsabilidad y funciones necesarias para desarrollar el puesto de trabajo.
6. La formación en Atención Primaria debe empezar en la universidad, con la creación de un área de competencias en Medicina de Familia y Pediatría de Atención Primaria, adecuando la docencia universitaria a la realidad de la Atención Primaria.
7. Se debe facilitar el acceso de los profesionales de Atención Primaria a las acciones formativas y promover la investigación, teniendo en cuenta las características propias de dicho nivel asistencial.
Aprovechamos este día, desde la responsabilidad y la ética profesional médica buscando siempre lo mejor para nuestros pacientes, para seguir proponiendo desde la colaboración y el espíritu constructivo, todas aquellas medidas que impulsen una atención sanitaria de calidad para nuestros pacientes».
