Castilla y León está inmersa estos días en pleno concurso de traslados tras la lista definitiva que se publicó el pasado mes de diciembre. La pasada semana se procedía al cese de quienes optaron a uno de ellos, y los plazos para la toma de posesión del nuevo puesto, a veces entre provincias, aumenta las ausencias en las ya mermadas plantillas de médicos.
Según explica Javier Salamanca, responsable de Atención Primaria de la comunidad autónoma, todos los médicos del proceso cesaban el día 30 de enero y la toma de posesión es a partir del 31. La situación está prevista y ya se conoce puesto que son plazos posesorios legales, pero depende del destino actual y del nuevo, lo que puede variar entre 1 y 10 días. «De alguna manera son permisos, hay que cubrir esos puestos hasta que se toma posesión, lo que en plantillas que ya tienen déficit de profesionales supone mayor sobrecarga para los que están ejerciendo», asegura Salamanca.
Este concurso de traslados ahonda en la falta de médicos que se vive, por ejemplo, en Medicina de Familia, ya que si se mueven de su puesto 150 médicos en Castilla y León y necesitan sus días preceptivos para incluso cambiar de residencia, no hay sustitutos en los lugares de trabajo que abandonan. «Ante esto, o sobrecargo a los que están o cierro esas consultas, y si hago esto último el plazo de demora para ver pacientes aumenta», recuerda el responsable de Primaria.
La situación es más grave en algunas provincias como Palencia, donde de por sí ya hay mayor déficit de médicos y no hay gente disponible para contratar y cubrir así esos huecos temporales.
