El secretario general de la Confederación Estatal de Sindicatos Médicos (CESM), Gabriel del Pozo, y el presidente del Consejo General de Colegios Oficiales de Médicos (CGCOM), Tomás Cobo, se han dirigido por carta al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, para pedirle que el reconocimiento al personal sanitario que se llevó a cabo en el Homenaje de Estado del pasado 15 de julio se haga extensivo a todos los médicos que han fallecido por coronavirus durante esta pandemia.
Lo han hecho a través de una misiva en la que se recuerda que el listado de profesionales fallecidos desde el inicio de la pandemia a cuyos familiares se les hizo entrega de la Gran Cruz de la Orden del Mérito Civil en el acto homenaje ascendía a 102 nombres, mientras que sólo el recuento de médicos habla ya de 115 profesionales que se dejaron su vida en la lucha contra la enfermedad. Por este motivo, Del Pozo y Cobo solicitan que se reconozca de igual manera a quienes no aparecen en ese listado difundido por el Gobierno, cuyos nombres, cotejados con todos los Colegios de Médicos nacionales, se le han enviado al presidente del Ejecutivo. «Ellos, igual que los reconocidos de manera oficial el pasado jueves, merecen todo nuestro respeto por haber priorizado su profesionalidad y su compromiso a su propia seguridad en beneficio de los pacientes, y es por esto que le solicitamos que ese reconocimiento en forma de Gran Cruz se haga extensivo también a ellos», señalan.
En esta línea, señalan que entre el colectivo de profesionales sanitarios han sido los médicos quienes más compañeros han perdido en esta batalla contra la COVID19 y reclaman, como vienen haciendo desde el inicio de la pandemia, la necesidad de que el contagio de COVID en profesionales sanitarios sea considerado enfermedad profesional y no un mero asimilado como está recogido actualmente. «Más de un centenar de compañeros fallecidos por estar en primera línea son el mejor ejemplo de lo acuciante y necesario que es ese reconocimiento», reiteran.
Por último, Del Pozo y Cobo solicitan en su misiva que el ejercicio de la Medicina sea considerado una profesión de riesgo, lo que permitiría una mejor cobertura de situaciones específicas como ésta que se ha vivido y que facilitaría aspectos como la posibilidad de una jubilación anticipada sin la merma retributiva en la pensión que supone actualmente.