Desde la Secretaría Técnica de Igualdad de la Confederación Estatal de Sindicatos Médicos (CESM) quieren aprovechar este 8 de marzo, Día Internacional de la Mujer, para agradecer el apoyo a los compañeros de Salud Laboral en la campaña puesta en marcha este año para evidenciar las diferencias autonómicas en materia de adaptación del puesto de trabajo de la médica durante su embarazo.
En este sentido, consideran discriminatorio que no haya una normativa nacional homologada y homogénea en el establecimiento de protocolos de seguimiento de riesgo en la gestación, plantillas profesionales con previsión de puestos adaptados, contratación ágil de recursos humanos para las sustituciones de estas situaciones y, por supuesto, implementación económica que evite las mermas retributivas.
Así, declaran que la Salud Laboral no puede ser distinta en cada comunidad autónoma, y por ello reclaman una adaptación del puesto de trabajo real, inmediata y de aplicación nacional una vez que se comunica la nueva situación de la facultativa.
«Un día como hoy nos gustaría a todos los vocales de Igualdad alzar la voz para pedir las mismas condiciones de trabajo que recomendamos a nuestras pacientes, con el objetivo de preservar cualquier riesgo para nuestras madres y nuestros hijos, conjugando protección y desarrollo laboral. Vivimos en un país con muchos retos pendientes respecto a conciliación, sobre todo si el colectivo profesional que forma parte de la llegada óptima de la vida al resto de hogares se ve obligado a alcanzar sus derechos en el juzgado», asegura Rocío Fernández, secretaria técnica de Igualdad de CESM.