El Sindicato Médico de Navarra tiene «la sensación de que se están haciendo las cosas de cara a la galería, para que parezca que se hace algo, y volvemos dejar pasar el tiempo».
La situación es crítica en el Área de Salud de Tudela por falta de médicos especialistas en el Hospital Reina Sofía (HRS) y, especialmente, en la Sección de Radiodiagnóstico.
Los facultativos no han parado de denunciar la situación actual, por la que se ven abocados a retomar la huelga ante la ineficiencia del actual equipo del Departamento de Salud.
Explican que se debe al incumplimiento de los acuerdos alcanzados entre el SMN y el Departamento de Salud en diciembre de 2019 y en febrero de 2023 tras las huelgas de los facultativos del SNS-O.
Lamentan que pese al esfuerzo del resto de los médicos por suplir la carencia, es indudable que la calidad de la atención a los niños con problemas urgentes se va a resentir.
La considera una pieza clave en el descalabro sufrido por la Atención Primaria en Navarra tras la pandemia, por su inacción y por su falta de ideas y de toma de decisiones estratégicas.
En el colectivo de laborales (MIR, FIR, BIR y PIR) ha pasado de los 8 delegados obtenidos en 2016 a conseguir 13 delegados, por lo que la representación de los facultativos en este ámbito resulta aplastante.
El Alto Tribunal desestima el recurso de casación del Gobierno de Navarra y el Colegio de Enfermería navarro sobre la titulación requerida para ocupar el puesto de director.
Con el voto a favor de 49 de los 50 parlamentarios, los grupos políticos aceptan explícitamente que la situación de los médicos requiere medidas extraordinarias.
El Sindicato Médico de Navarra explica que mientras no se corrija la desigualdad salarial entre comunidades será difícil que Navarra sea competitiva y atractiva y se favorecerá la falta de médicos.
Aprueba una modificación a la norma que permite solicitar excedencia voluntaria a todos los funcionarios salvo a los médicos, que deben sumar dos años en una plaza fija para ello.
Se solicita que se adopten las medidas necesarias y eficaces para proteger la salud de los facultativos y que redunda de forma directa en la calidad asistencial que prestan.