Las agresiones, la sobrecarga laboral, los incumplimientos de los acuerdos del 2019 y los nuevas plazas de continuidad han colmado el hartazgo del colectivo.
Exigen que estos certificados, o no se soliciten, o si se considera que deben exigirse lo correcto es hacerlo de forma legal y adecuada sin sobrecargar a los médicos de Atención Primaria.
Se vuelve a ignorar la orden del Tribunal Supremo que remitió la causa con mandato de investigar si habían hechos delictivos y los responsables de ellos.
Este RD viene a confirmar la obligatoriedad de la acreditación periódica, aunque sigue quedando indefinida y pendiente de una regulación posterior para concretar procedimiento, plazos o formas.
SIMEBAL-CESM insiste en que la razón fundamental de la sobrecarga asistencial es la falta de médicos, que perjudica directamente a los facultativos, a la relación médico-paciente y a la ciudadanía.
Desea poder seguir colaborando con las autoridades en el diseño de una infraestructura óptima para la AP, para lo que plantea una campaña en redes sociales próximamente.
El documento presentado a la consellera incluye 12 medidas que podrían ayudar a paliar la saturación de las consultas de Primaria y mejorar la calidad asistencial.
Exige que, antes de hacer pública la convocatoria del próximo año, se haga una valoración de la realidad actual y de la adecuación de las unidades docentes a los requisitos para su acreditación.
La encuesta realizada como primera toma de contacto constata la voluntad de cambio, lo que deberá ir seguido del inicio del trabajo para poder plantear un nuevo modelo organizativo.
Reclaman no imitar las ideas anunciadas en otras comunidades de cubrir la falta de médicos con personal de enfermería por ser “descabelladas e irresponsables”.