La decisión drástica se toma no solo por la falta de respuesta de la administración, sino porque se ha seguidos degradando las condiciones de los residentes.
Exigen que “haga las gestiones oportunas para que por los departamentos ministeriales que corresponda se aborden estos problemas a la mayor brevedad posible”.
«La gran mayoría de nuestras reivindicaciones le corresponden a la Conselleria de Sanitat, la cual no solo se niega a recibirnos sino que pone trabas a nuestro derecho constitucional a la huelga».
La decisión se produce ante el silencio de la Conselleria, conocedora de las penosas condiciones laborales en la que los residentes prestan sus servicios.
El sindicato madrileño recuerda que los residentes no son personal estructural, sino personal en formación y, por lo tanto, no pueden ser objeto de servicios mínimos.
Comenzarán el día 13 de julio y se celebrarán en el Salón de Actos Ernest Lluch del Ministerio, con turnos de recepción en cada una de las sesiones para 150 aspirantes.
Exponen sus reivindicaciones laborales, retributivas, de carácter social, las denuncias relativas a la legislación vigente, las reivindicaciones para plantear ante el Ministerio y la necesidad de crear un órgano supervisor.
La nula intención de la Consejería de Sanidad de la Comunidad de negociar el Convenio MIR presentado hace semanas ha empujado a continuar con la hoja de ruta anunciada.
El secretario general, Gabriel del Pozo, hace un llamamiento para que tanto desde Sanidad como los propios electores, adopten todas las medidas de seguridad necesarias.
El Defensor del Pueblo repetía que no aprecia vulneración de derechos y libertades que justifiquen su intervención pero señalaba que estará vigilante en el proceso.
Un grupo de opositores han presentado la vía cautelarísima ante el Tribunal Supremo, en la que se ha dado un plazo de 24 horas para presentar documentación y derivan a cautelares.
Una vez levantado el estado de alarma, sin restricciones a la movilidad nacional, con el país abierto incluso al turismo internacional y con diferentes pruebas masificadas realizadas, no entendemos la obstinación de los responsables.
Los residentes sufrieron en los años 2010 y 2012 importantes recortes de carácter progresivo y después de varios años de sueldos congelados las subidas que se han realizado después han sido de carácter lineal.
Venimos demandando el papel que debe tener la profesión médica en la toma de decisiones que nos afecta y exigimos que se nos tenga en cuenta en el origen de los desarrollos normativos y legislativos.